
“Boca jugó a lo Boca y River fue River, jugó un gran primer tiempo y en el segundo se le cayó la bombacha” decía Diego Maradona en 1997, tras ganarle a River 2 a 1 en el Monumental y era la perfecta descripción de como Boca superaba en cada clásico a su eterno rival con más carácter que juego.
21 años después sucede totalmente lo contrario. Ayer el equipo Xeneize perdió 2 a 0 de local y sumó otra dolorosa derrota ante River.
Con jugadores nerviosos y figuras que no aparecieron completamente, el azul y oro se vio dobleglado tácticamente por un equipo compacto que encontró los espacios y con dos ocasiones claras le bastó para llevarse un triunfo de La Bombonera. El equipo de Boca fue tibio en la cancha, no contó con las ganas correspondientes para llevarse puestos a los de La Banda y llegó tarde en cada disputa, así llegó el primer gol, con una pelota recuperada en plena salida y un mal rechazo de Más que dejó la pelota en el área, el Pity Martínez la clavó con una tremenda volea en el arco de Rossi para poner en ventaja a la visita.
El Xeneize tuvo dos tiros de Benedetto y un desborde de Pavón que no conectó bien Tevez, pero por momentos seguía caminando la cancha. Entró Cardona por Jara y debió irse expulsado por un codazo a Enzo Pérez, pero el árbitro sólo le mostró la amarilla y concluyó la primera mitad con el parcial 1 a 0 a favor de los visitantes.
En el segundo tiempo, Boca inclinó la cancha al principio con un par de situaciones, hubo tres penales que no cobró Vigliano y llenó de polémica el clásico. Pero promediando la segunda mitad, hubo conexión Quintero-Borre, le quedó la pelota picando a Scocco que fusiló a Rossi y chau clásico, Boca no jugó mas, se apagó a pesar del fervor que emanaba de las tribunas y se dejó vencer.
Nuevamente se perdió otro clásico, se fue casi sin que nadie se de cuenta. River ganó dos veces en la Bombonera después de 24 años y dejó en claro que en este lapso de tiempo, donde el Xeneize tiene en el banco a un entrenador que despista con sus conceptos tácticos y enfrente tienen a un director técnico que tiene claro como jugar esta clase de partidos, se cambiaron los roles. Boca juega un poco más que el rival y hasta puede parecer que merece más pero siempre River le arrebata el clásico con más actitud, yendo a cada dividida como si fuera la última y mostrando que River juega a lo Boca y a Boca se le cae la bombacha cuando tiene a River enfrente y en cada partido importante.
Redaccion: Martín Casafu


